*Óleo: Asamblea de la Florida de Eduardo Amézaga

Hoy, 25 de agosto, se festeja el día en el que simbólicamente nacemos como nación independiente.

Variadas son las lecturas en cómo y cuándo realmente lo hemos hecho.

Lo que no es variado ni discutido es la forma en que las mujeres hemos sido eliminadas de este relato.

Porque no podemos ser ingenuas/os/es en lo deliberado de este acto que, en definitiva, no es más que una construcción histórica, como todas, que se cuenta desde una mirada. Y esa mirada es la del varón, blanco, heterosexual… En definitiva, del sujeto moderno

¿Por qué en ninguna imagen icónica de nuestra historia aparecen mujeres? ¿De verdad creemos que ni una de nosotras ha hecho nada por nuestra independencia?

¿Qué se supone que estábamos haciendo en esos momentos?

Claramente estábamos relegadas al mundo privado, pero desde allí hemos sostenido la vida de la humanidad, como lo seguimos haciendo hasta el día de hoy.

¿Por qué nadie cuenta la importancia que ha implicado en el proceso independentista la generación de alimentos o de los cuidados? ¿Acaso esos supuestos revolucionarios varones se hacían ellos mismos los alimentos? ¿Quién cuidaba a sus hijos/as para que pudieran estar en batalla?

Pero no solo ocupamos esos lugares, en variados y diversos sectores hemos contribuido al proceso revolucionario independentista: desde vinculaciones en organizaciones clandestinas, formando redes de espionaje, planificando emboscadas, recolectando y pasando información, hasta la organización en ámbitos privados de politización generando reuniones en las casas, recolectando fondos o medicamentos, entre otras acciones.

Hoy proponemos reivindicar y saludar a nuestras hermanas que sostuvieron la revolución con sus cuerpos, como lo hacemos día a día cada una de nosotras.

Salud a las revolucionarias anónimas que sin ellas la revolución no hubiera sido posible y también a aquellas, pocas, que están escondidas en algún documento histórico como Josefa Oribe o Ana Monterroso de Lavalleja.

¡Hagamos Alboroto, hagamos visible lo invisible!